Informe-memoria científica de la intervención arqueológica de urgencia Carril de las Tomasas nº 4 en 2001
La excavación arqueológica de urgencia realizada en el carril de las Tomasas nº 4 (Granada) ha permitido documentar la exitencia de la fase de ocupación más antigua del Albaicín. Se excavó parte de una cabaña de planta circular, con zócalo de mampostería, del Bronce Final (IX-VIII a.C.). Sobre esta fase se superpone una cabaña del periodo Ibérico Antiguo.
CONCLUSIONES.
En función de los datos obtenidos del registro arqueológico podemos elaborar la secuencia de ocupación del solar estableciendo una serie de fases históricas que al contrario de lo que suele ser habitual en las intervenciones urbanas, especialmente en el Albaicín, no se nos presenta demasiado compleja y sí muy clarificadora sobre los orígenes de la ciudad siendo las que siguen:
FASE I. BRONCE FINAL (SIGLO IX-VIII A.N.E.).
Formada por los restos de la Cabaña 1, muy arrasados y vinculado a un suelo de ocupación con un hogar excavado en el mismo asociado a abundante cerámica realizada a mano como ollas globulares, vasijas de borde vuelto y algunos fragmentos de cerámica de servicio como fuentes con borde vuelto que presentan un acabado en base a un espatulado interior y exterior. Según estos materiales su cronología es del siglo IX-VIII a.n.e, permitiendo fechar esta estructura y su nivel de arrasamiento en un momento del Bronce Final.
…
FASE II. PROTOIBÉRICO (SIGLO VII A.N.E.).
La segunda fase de ocupación detectada pertenece a un momento posterior cuando ya se han introducido ciertas transformaciones en las sociedades de la Prehistoria Reciente, comenzando a operarse las transformaciones de tipo social, económico y cultural que nos llevarán hasta el mundo ibérico.
De hecho en este solar sobre los restos de la cabaña del Bronce Final de planta circular o elíptica se dispone otra cabaña de época Protoibérica, del siglo VII a.n.e., ya estructurada en al menos dos estancias (Sector 1 y 2) de planta cuadrada y trapezoidal, con las esquinas ligeramente redondeadas, construidas sobre un zócalo de mampostería de mayores dimensiones
que el utilizado en la cabaña prehistórica sobre el que se desarrollaría un alzado de tapial y/o adobe, con suelos de tierra apisonada sobre los que se documentaron distintos estratos originados por su ocupación y un hogar. La ocupación del espacio parece mucho más compleja e intensa pues se puede
apreciar un aterrazamiento en dirección Este, delimitado por un muro de carga que a su vez delimitaría otra cabaña.
…
FASE III. MEDIEVAL-MODERNO.
Las transformaciones postdeposicionales sufridas solo han permitido que quede intacta la estratigrafía correspondiente a los periodos descritos quedando únicamente como evidencia de que debió existir una ocupación medieval y moderna una interfacies que cubre el nivel de arrasamiento de las fases Prehistórica y Protohistórica en la que aparecían mezclados materiales
antiguos con otros medievales y modernos en posición horizontal ya que de hecho esta zona se englobaría dentro del perímetro de la Qasba Qadima del siglo XI. De todas formas, en un momento no determinado de la Edad Moderna quedó deshabitada produciéndose una colmatación con sedimentos en ladera formando la pendiente que fue documentada.
FASE IV. CONTEMPORÁNEO.
La última fase estratigráfica se corresponde con los restos de una casa de principios del siglo XX que ocupaba el solar de la que sólo han quedado los restos de un muro y un pozo ciego que se vieron sustituidos por la actual vivienda. Ambas construcciones alteran y destruyen parte de la estratigrafía.
