El boom del alquiler vacacional de pisos sigue imparable y campa a sus anchas en los principales destinos turísticos de España tras años de actividad libre y descontrol. Hoteleros, asociaciones turísticas y patronales mantienen su oposición y sus críticas a una práctica que consideran un foco de economía sumergida de dimensiones gigantescas. Fuente: El Mundo, 17-06-2018Continúa >>