[PRENSA] El PSOE pide a la Junta que “deje de mirar para otro lado” y adopte medidas para limitar las viviendas turísticas en barrios como el Albaicín
El parlamentario andaluz Gerardo Sánchez ha pedido al Gobierno andaluz que “deje de mirar para otro lado” y adopte medidas para limitar las viviendas turísticas en barrios como el Albaicín o el Realejo y recuperar la vida en los mismos.
Sánchez, que ha elevado este asunto a la Comisión de Turismo del Parlamento andaluz para interpelar al consejero del ramo al respecto, también ha reclamado a la Junta que invierta en mejorar infraestructuras y servicios para las personas residentes e impida que estos barrios “pierdan su alma”.
“Si Moreno Bonilla no lo hace, lo siguiente que perderán será su atractivo turístico”, ha subrayado el socialista que se ha mostrado contrario a que el Albaicín o el Realejo “pierdan su identidad y población o que se deshumanicen al desaparecer niños y mayores de sus calles”.
Sánchez ha apuntado que la Junta “no puede asistir impasible a la pérdida de barrios que son Patrimonio de la Humanidad y que en sus pobladores han tenido a sus principales valedores y forjadores de su carácter”.
En ese contexto, ha subrayado que “la continua transformación de viviendas residenciales en apartamentos turísticos está expulsando a los vecinos del barrio sustituyéndolos por turistas”.
Así, ha considerado que el “descontrol” en esta actividad genera inconvenientes al vecindario, por ejemplo, como que “la mitad de las veces no pueda coger el microbús de transporte público que conecta el Albaicín con el centro porque las plazas están acaparadas por turistas”.
“Por no hablar de los escándalos que los turistas forman de madrugada cuando regresan a sus apartamentos tras una noche de fiesta”, ha expuesto entre otros asuntos como el hecho de que, a diario y a cada hora, los vecinos oyen las explicaciones que un guía ofrece con un pequeño altavoz a un grupo de turistas.
Sánchez ha rechazado esa situación y ha insistido en que el gobierno de Moreno Bonilla debe actuar ya ante “la realidad diaria que padecen los habitantes de este tipo de barrios”.
