Los grafiteros quieren pintar y nosotros queremos un barrio y un patrimonio limpios
Desde la Asociación de Vecinos Bajo Albayzín, queremos manifestar una vez más nuestro malestar ante el auge de una actividad que está degradando un barrio Patrimonio de la Humanidad, una actividad que tiene el Albayzín desde Elvira hasta San Miguel Alto lleno de toda clase de pintadas, y también de grafitis. Que no reparan en afectar al Patrimonio Mundial, tanto en sus monumentos como en cualquiera de sus calles y callejuelas. Da igual un spray o una brocha todo sirve para dejar su huella, sea en piedras milenarias como el alminar de San José, aljibes como el del Zenete, palacios como DaralHorra, el Arco de las Pesas,…
Los vecinos del Albayzín no tendríamos que ser los únicos que defendiéramos la conservación digna de este Patrimonio, sino toda la ciudadanía de Granada. Afortunadamente cada vez más voces se alzan contra estas prácticas, Cultura, el Centro UNESCO,… Sin embargo, en estos días un barrio tan castigado por estas prácticas es escenario de un paseo “colorista” en el que se pretende valorizar una actividad que tantos problemas está dando a la ciudad.
Desde la Asociación no podemos acusar que sean los mismos que hoy ponen sus lienzos y sus carritos, los que ayer pintaban en nuestro muros y monumentos, pero entendemos que sólo una conciencia ciudadana que rechace el uso de la calle de forma indiscriminada para realizar esta actividad, será la que impida que estos atentados sigan produciéndose. Con ello no rechazamos que pueda haber espacios que puedan servir de expresión artística en la vía pública, pero rechazamos tajantemente los apoyos y cursillos que en muchas ocasiones se dan por la propia administración, que luego debe gastarse cientos de miles de euros en limpiar los grafitis de la ciudad.
Si con esta actividad pretenden que los vecinos del barrio aceptemos esta práctica, rotundamente manifestamos que no. Luchamos por preservar y mantener un Albayzín digno, habitable, que pueda pasar a futuras generaciones con toda la carga de historia, patrimonio y vida de la que es testigo.
Granada a 20 de febrero de 2009