En diciembre, y tras dos meses de retraso, la alcaldesa inauguraba el nuevo pavimento de la Cuesta Alhacaba y de la Placeta de la Merced con una inversión de 1.226.384 euros, cofinanciados en un 80 por ciento por la Unión Europea a través del Fondo de Desarrollo Regional (FEDER) y un 20 por ciento por el Ayuntamiento de Granada.
Solo CINCO meses después el pavimento se está deteriorando: grietas, adoquines levantados, fallo en la rejilla situada al final de la Cuesta Alhacaba,… Alguien debe responder por esto, sean contartistas, técnicos, responsables municipales,… y tomarse las medidas para su reparación. No puede ser que una obra pública se realice de este modo con el coste económico y social que ello conlleva, y las molestias que la obra ha supuesto a la ciudadanía.
Una semana después el deterioro aumenta y solo se coloca una señalización con un pivote.
