Granada garantiza protección de Albaicín y pide abrir la mano a obras vecinos

Isabel Nieto concejal Urbanismo

La alcaldesa en funciones del Ayuntamiento de Granada, Isabel Nieto, ha garantizado las medidas de protección del barrio del Albaicín, declarado patrimonio de la Humanidad por la Unesco, hasta que la Junta apruebe su nuevo plan y ha abogado por «abrir un poco más la mano» con las obras de los vecinos.

Leer en La Vanguardia, 06-08-2015

Nieto ha hecho estas consideraciones a preguntas de los periodistas y después de que el portavoz de IU en el Ayuntamiento de Granada, Francisco Puentedura, haya criticado hoy el abandono del barrio patrimonial y la falta de un plan especial de protección para el Sacromonte.

La alcaldesa en funciones ha recalcado que el Albaicín está «perfectamente protegido» y ha recordado que el Ayuntamiento ha redactado un nuevo plan especial de protección para estos dos barrios históricos que está pendiente de la aprobación de la Junta de Andalucía a falta de «dos o tres flecos pendientes», según Nieto.

Ha resaltado además que el Ayuntamiento está dispuesto a «quitar o introducir» las medidas que el Gobierno andaluz considere adecuadas para alcanzar el visto bueno del Plan, aunque ha insistido en que el documento es «una actualización del que hay, que existe y está en vigor».

Nieto ha recordado que cada licencia de obras que afecta al barrio pasa por la comisión provincial de Patrimonio o por la mesa técnica del Plan Albaicín, que «mira con lupa» los proyectos para garantizar la protección de cualquier inmueble con valor arquitectónico.

«Otra cosa es que haya que actualizar plan, abrir un poco más la mano por el calvario que supone a cualquier vecino hacer una obra», ha apuntado la alcaldesa en funciones, que ha lamentado la «ruina» que representa para los vecinos afrontar las catas arqueológicas.

Nieto ha pedido además a la Junta que facilite los proyectos de los vecinos para mantener vivo el barrio y que ofrezca programas para reformar las viviendas, ya que el Ayuntamiento tiene «el deber de colaborar, pero no puede tener iniciativas ni tomar decisiones», ha sentenciado.