Torres Hurtado ha aclarado que no se opone a esta clase de iniciativas, si bien matiza que, de acuerdo a las indicaciones de la Unesco, los ingresos que genere este bien debe revertir en ese mismo
Leer en Ahora Granada, 16-12-2014
El alcalde de Granada, José Torres Hurtado (PP), ha criticado que el Patronato de la Alhambra se oponga a su petición de que se destinen dos euros de la entrada al monumento para la rehabilitación del barrio del Albaicín y, sin embargo, invierta en espacios que “están fuera” de la declaración de Patrimonio Mundial, como la Fundación Rodríguez Acosta, o “haga negocios con una tienda” que “nada tiene que ver” con el mantenimiento del patrimonio.
A preguntas de los periodistas, Torres Hurtado ha aclarado que no se opone a esta clase de iniciativas, si bien matiza que, de acuerdo a las indicaciones de la Unesco, los ingresos que genere un bien declarado Patrimonio de la Humanidad deben revertir en ese mismo patrimonio, por lo que no ve “lógico” que se impulsen estas medidas a la vez que se rechaza la propuesta municipal para garantizar el mantenimiento del Albaicín, que también ostenta esta distinción. “Para unas cosas sí es legal y para otras no”, ha criticado.
“La ciudad pierde 17.000 euros diarios que se podrían estar cobrando a los ciudadanos que vienen a la Alhambra, es una iniciativa que se hace en Europa entera”, ha defendido el regidor, quien advierte de que España ha dejado de ser receptora de fondos europeas para ser “dadora” de los mismos, de modo que han de buscarse otras vías de financiación para conseguir esa “inversión extra” que necesita el Albaicín.
“No entiendo la postura de la Junta” o de la directora del Patronato de la Alhambra, María del Mar Villafranca, de “negarse a hacer esto, pues lo que se está pidiendo es que se aumente dos euros el precio de la entrada para que ese dinero finalista vaya al Albaicín” y al no hacerlo “que sepan que son unos enemigos de la ciudad”, ha clamado el regidor.
Así, se ha mostrado convencido de que su propuesta “no choca con la ley”, salvo que, según ha dicho, “te encuentres con una persona que no quiere a Granada para nada o que obedece ciegamente a Sevilla”, que las dos cosas pueden ser”.
