¿Rehabilitación en el Albayzín?
Si el Sr. Eliezer, consultor de la UNESCO, volviera al Albayzín no tendría que molestarse en elaborar un nuevo informe, le serviría el de 1982. La situación es la misma, o peor, que en tiempos de su visita.
“El gran problema del despoblamiento” se ha agravado hasta límites inimaginables y son precisamente las Administraciones Públicas (todas) las que han sido incapaces de parar esa sangría que nos está convirtiendo en una reserva exótica. La política de subvenciones está afianzando las posibilidades de alquiler de los propietarios con más medios y mejores viviendas (es sintomática la opción por casas de gran valor patrimonial y económico del Área de Rehabilitación de la Junta de Andalucía) que a cambio de una cesión de diez años, reciben parte del valor de la obra de sus casas y hasta el proyecto gratis, en vez de proceder a la expropiación de las mismas por incumplimiento de los deberes de conservación contemplados en la legislación. Aún así, el programa de infravivienda va tan lento, que en cinco años no creemos que el número de edificios restaurados pase de cinco.
La división de viviendas amplias en pequeños apartamentos, incumpliendo la normativa de protección del edificio, no favorece precisamente el mantenimiento de la población, y sí a los alojamientos turísticos o de temporada, ya que es imposible que se mantenga una familia en un apartamento de 30 metros, (Zafra) por muy del siglo XVI que sea la casa rehabilitada y publicitada en extremo. Tampoco nos favorecen algunas intervenciones francamente mejorables que convierten el patio en una escalera o la puerta en una dudosa reja. (Lavadero de la Manchega)
No quedan atrás las demás administraciones, con listas de espera para infravivienda de años por parte del Ayuntamiento, tardanza que obliga a los vecinos a abandonar sus viviendas aquejadas de problemas estructurales y sin las mínimas condiciones de habitabilidad. Ni un programa “Eje Elvira-Gomérez” municipal fallido, que no ha conseguido alcanzar sus objetivos no solo en vivienda sino en adecuación de espacios públicos, tráfico, fomento de actividades económicas y desarrollo compatible con un Barrio Patrimonial, para muestra señalar que han quedado 17 edificios por rehabilitar solo en Elvira, sin contar las calles del entorno y el deterioro de la zona va en aumento. Ni se trata del “matiz de la concienciación”, eso no falta en el Barrio, tampoco la responsabilidad. ¿Quién ha hecho y quien mantiene lo que queda del Barrio sino sus vecinos? Se trata de la toma de conciencia por parte de las administraciones que están interviniendo y gastando las subvenciones públicas, de que no se puede asfixiar a un Barrio y pretender presentar como solución lo que no pasa de ser una chapuza, elaborada, quizás, por personal que ya ha demostrado que no es el más idóneo para acometer una tarea tan importante y necesaria para todos La AAVV solicita un plan de rehabilitación del Barrio, por parte de TODAS las administraciones, debidamente consensuado con los residentes y su AAVV, que contemple no solamente la intervención en edificios, sino que incluya una política de subvenciones justa, intervención en los espacios públicos, plan de infraestructuras, aspectos medioambientales (ruidos, limpieza, contenedores, ocupación de vía pública, ordenación de actividades económicas, horarios…) tráfico, atención especial para personas mayores, equipamientos sociales y deportivos, promoción del comercio tradicional y cuanto necesita un barrio que además de Patrimonio de la Humanidad, necesita ser habitable y depender de un peregrino sorteo para alejar preferentemente a todos los mayores del barrio.