Panorámica del acopiadero y caseta de aseo.
Una crítica en clave irónica, pero con toda la carga de profundidad, sobre las obras municipales del llamado ‘camino de los miradores’.
Los albañiles que pululan estas semanas por la zona de la Carrera del Darro y la Churra han conseguido un privilegio que nadie ha disfrutado hasta ahora: cagar en medio de la placeta de Santa Ana, lindera con Plaza Nueva. La zona está llena de obras del supuesto “camino de los miradores”. Con sus consiguientes montones de escombros por varias calles, en el suelo y sin verter a contenedores como exige la normativa de obras a cualquier mortal. Pero el propio Ayuntamiento la incumple en sus obras. La maquinaria pesada transita sin ningún complejo por los puentes históricos del Darro. Y aquí no pasa nada. El acopiadero de materiales y el cagadero de albañiles son el complemento más adecuado para el marco incomparable de la iglesia mudéjar de Santa Ana y la torre de la Vela al fondo. Este es un magnífico fotocall para el retrato diario de las primeras autoridades municipales. Ya están tardando.
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