El equipo de gobierno quiere evitar los incidentes producidos en el Puente del Pilar del año pasado. Para muchos, las aglomeraciones y los botellones de aquellos días estuvieron detrás del adelanto de una segunda ola de la pandemia que golpeó con mayor dureza a Granada que al resto de provincias andaluzas y provocó un enorme descalabro en los principales sectores económicos.
Con el objetivo de prevenir nuevos desmanes, los responsables de Protección Ciudadana, Raquel Ruz, y de la Policía Local, José Antonio Moreno, informaron ayer de la activación de un dispositivo especial hasta la madrugada del martes al miércoles compuesto por 547 agentes. En turnos de mañana, tarde y noche, el protocolo diseñado prevé que haya entre 10 y 15 unidades operativas en la vía pública, una medida destinada a asegurar un control sobre el terreno de los efectivos policiales.
Según confirmaron tanto Ruz como Moreno, los agentes van a prestar una especial atención a la prevención de comportamientos incívicos como el consumo de alcohol en la vía pública o el incumplimiento del aforo máximo en los establecimientos hosteleros.
Para lograrlo, el dispositivo va a distribuirse por aquellos puntos complicados como el Centro o el Albaicín, donde en las últimas semanas los vecinos vienen denunciando problemas relacionados con ruidos y botellones. El superintendente de la Policía, no obstante, descartó que Granada está lejos de los macrobotellones que se ven estos días en Barcelona y Madrid y prefirió hablar más de un problema con «microbotellones».
13 octubre, 2021
Veo que la intencion fue controlar la via publica, pero que pasa con los pisos de estudiantes? En doctor azpitarte 1, 1C , una fiesta en el piso y tirando los vasos por el balcón, creo que la policia deberia intervenir si desde la calle ven este tipo de comportamientos incívicos tambien