Dos individuos de 29 y 32 años se encuentran ingresados en la Unidad de Cuidados Intensivos tras las puñaladas recibidas en una reyerta entre ambos. Los dos están estables dentro de la gravedad.
Los hechos sucedieron a las 22.30 horas de la noche del lunes en la albaicinera calle Cristo de las Azucenas.
Los testigos presentes en el lugar confirmaron a los investigadores que ambos empezaron a discutir después de llevar bastante tiempo ingiriendo alcohol. Los dos presentaban síntomas de estar ebrios, según fuentes consultadas por IDEAL.
Fue un particular quien dio aviso al servicio de emergencias del 112 de que un individuo se encontraba con un cuchillo clavado en la espalda después de haber discutido con otro hombre que también presentaba heridas de arma blanca.
Tras personarse en el lugar Policía Nacional, junto a un dispositivo sanitario, pudieron tomar declaración a distintas personas que al parecer presenciaron los hechos.
Los vecinos de la zona manifestaron que estos individuos mantuvieron una fuerte bronca antes de iniciar la reyerta sin saberse el motivo.
Tras ser evacuados por el dispositivo sanitario, uno de ellos fue ingresado en el Hospital General Virgen de las Nieves donde llegó con un cuchillo clavado en la espalda.
La razón de no retirárselo era evitar que se desangrara por el camino ya que la hoja del cuchillo hacía las veces de tapón para contener la hemorragia. El otro herido, quien se encuentra en peor estado, se mantiene ingresado en la UCI de Neurotraumatología.
Los profesionales de la UCI de la ciudad sanitaria Virgen de las Nieves se han dejado la piel para mantenerlos con vida y de momento lo han conseguido.
Devolución
Los dos individuos son de nacionalidad senegalesa y tenían una orden de devolución a sus países después de haber llegado en patera meses atrás.
Una vez que se recuperen de sus heridas y puedan prestar declaración ante los investigadores policiales quedarán en calidad de detenidos por una tentativa de homicidio.
Estos dos individuos se encontraban por la zona del Albaicín de forma casual, no residen en esa barriada.
El dispositivo policial desplegado en el Albaicín meses atrás ha permitido expulsar del barrio a un grupo de quince personas que vivían de okupas y tenían a sus espaldas numerosos antecedentes penales. Tras la marcha del barrio este grupo la tasa delictiva ha bajado a mínimos.
