[PRENSA] Las obras del Hotel Reuma comenzarán esta semana con nuevas catas
Se harán unos últimos estudios para ver si aparecen restos de los muros del antiguo carmen entre sus paramentos
Tras décadas de abandono, esta semana, concretamente el 22 de octubre, comienzan las obras que darán una nueva vida al mítico Hotel Reuma a los pies de la Alhambra para convertirlo en un centro de interpretación del monumento y su conexión con el Albaicín además de zona expositiva. Un proyecto que supondrá un momento histórico en la rehabilitación de la ciudad y el monumento, que lo adquirió en el año 2000.
Según confirman desde el Patronato, será este miércoles cuando comiencen los trabajos que llevarán a la rehabilitación del hotel. Lo primero que se hará serán nuevas catas arqueológicas y pruebas. Aunque para la realización del anteproyecto y proyecto de obra se han realizado ya pruebas para ver posibles restos, como en toda obra, se ha abierto una posibilidad que se va a estudiar, que es la de que aparezcan entre los muros restos del carmen primitivo que se fue transformando hasta lo que después ha llegado a nuestros días. Ante esa posibilidad, la intervención se va a iniciar con esas pruebas prospectivas. Y aunque las ya realizadas previamente no indican evidencias de su existencia, se va a hacer una última prueba y si aparece algo «se adaptaría el proyecto con una modificación para integrarlos en la obra», confirma el director del Patronato, Rodrigo Ruiz Jiménez a este periódico, que explica que se utilizarán medios de última generación para poder localizar algún resto entre los muros. Si no aparece nada, el proyecto se ejecutará tal y como está redactado.
El contrato de rehabilitación salió a licitación el pasado mes de marzo tras más de un lustro de trabajos por 1,9 millones y un plazo de 18 meses. El proyecto busca recupeerar los valores arquitectónicos del edificio, mejorando su accesibilidad, funcionalidad y habitabilidad y adaptando su interior al nuevo uso cultural. La intervención principal es la conservación del bien pero eliminando adherencias confusas de las viviendas que ocuparon el inmueble en el siglo XX. Porque se construyó como un carmen granadino al que se fueron realizando modificaciones. En 1910 se adaptó a hotel y después a viviendas, lo que añadió elementos sin valor al edificio que ahora se eliminarán. Desde el cierre del hotel pocos años después de su apertura, pasó a ser residencia de estudiantes, casa de vecinos, hospital durante la Guerra Civil, lugar de reunión de las logias masónicas y hasta camerinos provisionales durante las fiestas del Corpus Christi. Después fue abandonado hasta su adquisición por el Patronato de la Alhambra en el año 2000 para aprovechar su emplazamiento como espacio de interpretación.
La planta baja y primera serán los espacios de acogida del público, la planta segunda será para espacios administrativos y la tercera, una gran sala multifuncional.
El último posicionamiento sobre el proyecto ha sido el de la Academia de Bellas Artes, que se ha opuesto al mismo por considerar que el edificio no tiene valor para su rehabilitación y mantenimiento y pidiendo un debate sobre Romayla y el propio edificio. El proyecto de Romayla, que supone la adaptación de esa margen del río, está aún pendiente de los últimos vistos buenos.
