[PRENSA] La ratonera de la Carrera del Darro con tráfico el Día de la Cruz
El tráfico no se cortó hasta las 19:30 con largas colas de autobuses y coches y miles de personas hasta esa hora sorteando vehículos
3 de mayo. Día de la Cruz en Granada. Miles de personas en las calles, turistas, granadinos que van de un lado a otro para ver las cruces y llenan puntos específicos de la ciudad. Y el tráfico en algunos puntos no se cortó hasta bien entrada la tarde, dejando escenas de coches y peatones atrapados, inseguridad y protestas de los viandantes. Es lo que pasó ayer en la Carrera del Darro.
Miles de personas pasaban por esta calle dirección Albaicín para las cruces instaladas por ejemplo en el propio Paseo de los Tristes, el colegio Ave María o en San Cristóbal. Hasta las 19:30 horas no se cortó el tráfico llegando a producirse colas considerables de autobuses, taxis y VTC que impedía andar a los peatones y transitar a los vehículos. A esa hora, cuando al fin se decició cortar habiendo dejado momentos de inseguridad para los viandantes, se llegaron a acumular hasta siete autobuses, taxis y VTC, con una cola que llegaba desde el Puente de Cabrera hasta el inicio en Plaza Nueva.
En esa esquina que se estrecha, además, había dos personas con movilidad reducida en silla de ruedas que llevaban, según denunciaban, media hora para poder pasar. Los escalones que se abren en ese punto impedían que siguieran por la acera y tenían que pasar por la calzada. Pero los peatones, en masa, se colaban entre ellas y los vehículos cuando se podía y cuando no eran los coches los que impedían el paso. La gente se tenía que pegar a los edificios y muchos optaban por subirse al pretil del Darro, lo que generaba momentos de peligro. El comentario general: «Qué vergüenza, como está la calle. Un día así es increíble que se deje abierto el tráfico». En cruzar la calle entera se tardó unos 20 minutos sorteando coches y autobuses.
La Policía sobre las 19:30 se personó en ese punto y las personas en sillas de ruedas les afearon la situación, al igual que el resto de viandantes. Tuvieron que esperar a que pasara toda la fila de coches para dejarla finalmente cortada al tráfico desde Plaza Nueva. Una situación que generó las quejas de los granadinos y la incredulidad de los visitantes un Día de la Cruz en una vía especialmente delicada y que utilizaban miles de personas.
La misma situación después aunque menos peligrosa por la anchura del espacio en calle San Matías, donde también estaba el tráfico abierto y los autobuses subían y giraban justo en la esquina de la cruz del Nazareno, así como en la zona alta de Reyes Católicos.
