Limpiar la mugre y cuidar el Albayzín de tanto abandono
Al principio del mandato, hubo unos días de limpieza general, con algo de agua, chorros de desinfectante y mucha escoba que los vecinos valoramos positivamente.
Después, volvimos a la realidad y a convivir con los manchones en el suelo, las esquinas con todo tipo de restos y el olor a barrio abandonado a su mísera dotación de personal de limpieza, un personal al que no le podemos pedir más, de un lado al otro a diario.
Las buenas intenciones o las campañas publicitarias no se sostienen, es el día a día el que necesitamos.
Lo más urgente: establecer un nuevo presupuesto total de la ciudad, priorizando las verdaderas necesidades, a saber:
-Limpieza y ornato de espacios públicos y respeto al ciudadano.
-Devolverle al transporte público su lugar prioritario para su necesario uso a diario.
-No seguir permitiendo la tala de jardines enteros o árboles para satisfacer a los nuevos propietarios o negocios.
-Y comenzar desde ya ese necesario plan de rehabilitación obligatorio de las viviendas vacías del barrio para su uso en alquiler o venta a familias, nuevos vecinos y residentes, que ven como se especula años y años con ellas, vacías o en ruinas hasta que el maná las convierte en solares u otros usos y saben, que lo sabemos que NO ESTA PERMITIDO mantener en abandono viviendas y edificios en ruina.
¿Dónde están los cientos de expedientes de expropiación que ayudarían a recuperar el Albayzín y llenarlo de vecinos responsables?