Cámaras para perseguir a grafiteros

La pintada que se al fondo del Arco de las Pesas ha llevado a los vecinos a solicitar videocámaras. GiM 2014

Vecinos del Albaicín han solicitado al Ayuntamiento de Granada que coloque cámaras de vigilancia en el Arco de las Pesas, una de las puertas de acceso de la muralla zirí que ha sufrido de nuevo el azote de los grafiteros.

Leer la noticia de Álvaro Calleja en GranadaiMedia, 19-11-2014

La aparición hace escasos días de una enorme pintada en el interior del Arco de las Pesas, uno de los accesos que formó parte de la muralla que cercaba la Alcazaba Qadima, ha llevado a vecinos del Albaicín a solicitar la instalación de cámaras de vigilancia en los lugares con más valor patrimonial para disuadir a los vándalos.

La petición formulada en la Junta Municipal de Distrito, celebrada el martes en el edificio de la Chumbera del Sacromonte, ha partido de la asociación de artesanos del barrio y ha sido secundada por otros vecinos que consideran un “atentado contra el patrimonio” las pintadas que llevan apareciendo en los últimos años en distintos rincones del barrio. Las dismensiones exageradas del último grafiti han colmado la paciencia de los propios vecinos, partidarios de que se reconsidere la posibilidad de colocar cámaras para preservar el patrimonio, una solución que no todos ven adecuada ante la posibilidad de que colisione con el derecho a la intimidad, como así expuso la representante de la Asociación de Vecinos del Bajo Albaicín, María Dolores Santos.

El propio portavoz del equipo de gobierno y presiente de la Junta Municipal de Distrito del Albaicín, Juan García Montero, advirtió precisamente de los impedimentos legales para instalar cámaras de vigilancia, dispositivos que requieren de la autorización de la Subdelegación de Gobierno de Granada. Se refirió al argumento que en ocasiones se ha dado sobre la vulneración de las libertades individuales aunque, dada la preocupación vecinal y el singular espacio afectado por las pintadas, se comprometió a plantear la posibilidad de que se coloquen videocámaras en el Arco de las Pesas y abordar con la Junta de Andalucía la limpieza del lugar.

El debate sobre la instalación de cámaras no es nuevo. Hace unos años los comerciantes, con el apoyo del gobierno de José Torres Hurtado, presentaron un proyecto para colocar 15 cámaras en la zona comercial del centro con la intención de combatir la delincuencia. Sin embargo, una comisión del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía tumbó en 2008 la pretensión de los comerciantes por entender que se vulneraba la intimidad.

Sobre el capítulo de la limpieza de las pintadas, García Montero aludió a la dificultad que entraña, por culpa de los vándalos, iniciar un expediente de eliminación de grafitis en bienes patrimoniales, un trámite que se alarga en el tiempo porque requiere de consultas y autorización de Cultura, además de una partida presupuestaria elevada para costear la labor de un equipo de restauradores. En estos casos se utilizan productos especiales para que el tratamiento sea lo menos agresivo posible.

Lo cierto es que las únicas pintadas que afectaban al patrimonio y que  borraron totalmente en septiembre de 2011 fueron las de la fachada del Palacio de Dar al Horra, en cuyo trabajo se invirtió la cantidad de 60.000 euros.

El gobierno municipal ha consignado en los presupuestos de 2015 una partida de 40.000 euros para el programa antigrafitis, insuficiente para intervenir en cualquiera de los bienes patrimoniales afectados por la pandemia de las pintadas.

Fuentes  de la Delegación de Cultura de la Junta de Andalucía no quisieron pronunciarse sobre la posibilidad de instalar cámaras de vigilancia en bienes patrimoniales al considerar que es un asunto ajeno a su departamento que compete a Seguridad Ciudadana.