Ocho millones en patrimonio que no lucen
GranadaiMedia, 24-09-2014 Álvaro Calleja
El portavoz de IU en el Ayuntamiento de Granada, Francisco Puentedura, ha exigido hoy al Ayuntamiento de Granada y a la Junta de Andalucía un plan director para recuperar las murallas de Granada después de conocer que la asociación Hispania Nostra ha incluido la muralla zirí y los yacimientos romanos de los Mondragones en su lista roja de bienes patrimoniales en peligro.
En su comparecencia ante los medios de comunicación, Puentedura se ha centrado en la “degradación” y “abandono” de las murallas del Albaicín y ha criticado la “incompetencia” de ambas administraciones que, pese a invertir 8 millones de euros en los últimos diez años, “no ha lucido ni ha servido para recuperar el patrimonio”. “Los millones de euros han caído en saco roto porque el patrimonio requiere de una inversión continuada “, ha denunciado Puentedura, quien se ha referido a la “mala planificación” a la hora de abordar la restauración de las murallas.
Puentedura ha enumerado las actuaciones “fallidas” que no han terminado de completarse pese al dinero destinado y, en algunos casos, dilapidado como ocurrió con el inicio de la obra del paseo arqueológico o lineal de la muralla zirí, que paralizó la Delegación de Cultura de la Junta de Andalucía después de llevarse a cabo excavaciones y cimentar el interior para colocar pasarelas. También ha mencionado el proyecto inacabado para la recuperación de la muralla de la Alberzana, donde recientemente los vecinos denunciaron la situación del parking “ilegal” de coches así como la basura acumulada en la zona; o el tramo degradado más próximo a San Miguel alto antes de llegar a la intervención que realizó el arquitecto Antonio Jiménez Torrecillas en la muralla nazarí, igualmente deteriorada por la suciedad y las pintadas.
Otro ejemplo de “despropósito” que protagonizaron Ayuntamiento y Junta de Andalucía guarda relación con el enterramiento hace unos meses de un tramo de muralla histórica en el Huerto del Carlos por discrepancias a la hora de asumir su conservación. Por último, Puentedura censuró que el Ministerio de Fomento haya dejado de invertir el uno por ciento destinado a la restauración del patrimonio cultural que sirvió en el pasado para restaurar bienes en mal estado de conservación.
La titularidad de las murallas, declaradas Bien de Interés Cultural, es del Estado si bien La Junta de Andalucía asume desde hace años competencias en la conservación tal y como queda regulado en la Ley de Patrimonio Histórico de Andalucía. El Ayuntamiento de Granada tampoco está exento de responsabilidad y ha participado en la financiación de varios proyectos hoy paralizados como es el caso del paseo arqueológico de la muralla zirí .
En declaraciones a GranadaiMedia, el portavoz del gobierno municipal y concejal de Cultura del Ayuntamiento de Granada, Juan García Montero, considera fuera de lugar la crítica de IU. García Montero respondió a Puentedura recordándole que se opuso a la propuesta del PP para que el Patronato de la Alhambra financiara la recuperación del patrimonio del Albaicín con una parte del dinero de las entradas. “Hemos hecho todo lo que podíamos hacer. Sentémonos a formalizar un plan estratégico para canalizar fuentes de inversión y financiación. Ellos que se niegan en rotundo a la propuesta de financiación con las entradas de la Alhambra se atreven a criticar la gestión del patrimonio”, censuró.
La reclamación de IU para que se ponga en marcha con urgencia un plan director de las murallas se produce después de que la asociación Hispania Nostra incluyera la zirí, del siglo XI, en el listado bienes en peligro a petición de la Asociación de Vecinos del Bajo Albaicín. El colectivo vecinal participó en la reunión de asociaciones y entidades para la defensa del patrimonio cultural que se celebró en junio en la Alhambra.
Además de exponer la degradación del patrimonio paisajístico en el Albaicín, que alcanzaría a la práctica totalidad de las murallas, la asociación reclamaba mayor participación de los vecinos en la toma de decisiones: “La solución pasa por el conocimiento exhaustivo de la realidad, y los vecinos podemos aportar este necesario análisis informado y cuidadoso. La solución pasa por los vecinos. Esta visión de lo cotidiano debe llevarse, y su voz estar presente allí donde se toman las decisiones, se elaboran los proyectos, se gestiona su desarrollo y se les asigna presupuesto y plazos”.
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