theme-sticky-logo-alt
theme-logo-alt

Granada desaparecida

Profesor Juan Manuel Barrios en la conferencia sobre la Granada desaparecida en La Madraza

Profesor Juan Manuel Barrios en la conferencia sobre la Granada desaparecida en La Madraza

Pulse sobre la imagen para acceder a la conferencia.
El historiador Juan Manuel Barrios descubre la Granada olvidada asentada sobre aquellos monumentos y edificios desaparecidos en los dos últimos siglos.
Sus investigaciones sobre la destrucción del patrimonio histórico parten de la fisionomía de la misma en vísperas de las revoluciones liberales, en particular de la Guerra de la Independencia.
Como asegura este historiador, “la cuestión es querer conservar las cosas. Y para ello, hay que apreciarlas”. Y eso es lo que según Juan Manuel Barrios precisamente faltó en Granada y todavía sigue siendo hoy una asignatura pendiente en buena medida: “una conciencia cívica, una conciencia ciudadana de que el patrimonio es un bien que merece la pena conservar”. Que cuesta dinero, que cuesta sacrificios pero, como bien comentaron algunos historiadores franceses en su momento; lo que se pierde también tiene un valor.

Manuel Barrios centra precisamente su exposición en descubrir y valorar lo que se ha perdido para ayudar a comprender lo importante que es preservar lo que permanece.
  El fin  de la ciudad sacralizada, motivada por la Desamortización, y las reformas del ensanche interior, como el embovedado del Darro y la apertura de la Gran Vía, concentran parte de esta crónica distinta por esa Granada que, pese a todo, es polo de atracción para el turismo por ese rico patrimonio monumental no exento de avatares.
Algunos de ellos especialmente dramáticos desde el punto de vista arquitectónico, como los producidos durante el desarrollismo franquista. Fenómeno que se dio particularmente en los años 60 y 70, y que en buena parte pobló la urbe de edificios de una arquitectura hecha con poco presupuesto y “ninguna sensibilidad” salvo contadas excepciones.

Destrucción de puentes, algunos de ellos que se remontaban al siglo XI, otros al siglo XIV, y demolición de casas cuyo valor histórico no fue evaluado, son algunas de las tropelías realizadas en la época en aras a construir barrios nuevos más allá de la ciudad histórica preexistente. Una “hecatombe sin parangón alguno” ya que se atacaron todos los valores de la ciudad histórica sin compasión.

 

Granada y todavía sigue siendo hoy una asignatura pendiente en buena medida: “una conciencia cívica, una conciencia ciudadana de que el patrimonio es un bien que merece la pena conservar”. Que cuesta dinero, que cuesta sacrificios pero, como bien comentaron algunos historiadores franceses en su momento; lo que se pierde también tiene un valor.
El balance deja más de ochenta edificios civiles y cerca de setenta religiosos, la mayoría desaparecidos y otros muchos hoy desfigurados.
Artículo anterior
Puerta de entrada al Albaicín más monumental
Siguiente artículo
La muralla zirí sigue entre hormigón

0 Comentario

15 49.0138 8.38624 1 1 4000 1 https://albayzin.info 300 0