Mejor gestión para pintura antigrafitiEmilia Ocaña Gómez La Opinión, 28-11-2008 Ideal, 29-11-2008 |
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Ante la decisión del Ayuntamiento de
eliminar los garabatos (a los que llaman grafitis) del Albaicín y darle
una pátina antigrafiti de modo que luego se pueda eliminar con un gel
específico, nada que objetar. La intención es muy buena y encomiable. Ya
lo han hecho en la zona de BibRambla y en toda la calle Elvira y los
resultados fueron espectaculares al principio. Pero pasado un tiempo los
vándalos de las pintadas han vuelto a hacer de las suyas y las zonas
presentan, otra vez, firmas y pintadas por numerosos espacios del centro
de la ciudad Todo eso es debido a que el modo de actuar del área de
Rehabilitación del Ayuntamiento (encargada de la limpieza en las zonas
mencionadas) no es la más lógica. Para la zona de Elvira podían haber aprendido de los errores cometidos en BibRambla. Pero no. Ambas zonas están de nuevo con montones de pintadas que nadie elimina. Hablo con conocimiento de causa porque vivo en esta zona. Tras acabar los trabajos en la calle, los trabajadores de la empresa singrafiti informaron a los comercios sobre el gel (que cuesta 90 euros un litro) que habían de comprar para eliminar cada pintada posterior. Muy pocos comercios lo compraron y mantienen sus paredes limpias. Las comunidades de vecinos ni siquiera fueron informadas, la que se informó lo hizo por pura curiosidad de sus propietarios, y se cuentan con los dedos de una mano las que actúan contra esos garabatos. El área de Rehabilitación reconoció en llamada telefónica que realmente es absurdo dar una pátina antigrafiti si luego no se va a mantener, que no exigen un compromiso de mantenimiento y que es muy difícil coordinarse con otras áreas del Ayuntamiento para exigir mantenimiento o poner sanciones por no hacerlo. Para ese viaje no hacen falta alforjas. Con pintar con pintura normal hubiese sido suficiente, y no hubiese sido necesario gastarse 240.000 euros en Elvira para que ya esté otra vez bastante sucia. Ni para que los de Inagra quiten las pintadas con pintura normal (en las paredes municipales). Para eso no hace falta pintura antigrafiti. Si no exigen un compromiso de mantenimiento a los responsables de los edificios ¿para qué la pátina antigrafiti? Y si la policía no actúa con más prontitud cuando se le llama para que cojan in fraganti al que hace las pintadas (las pocas veces que se les ve) ¿para qué hacer nada? Y si el Ayuntamiento no cambia la normativa o hace cumplir a rajatabla la que hay ¿para qué encomendarle a la Fundación Albaicín una campaña de limpieza? Y si la Policía coge in fraganti a un vándalo pintando, por ejemplo, en el Convento de Santa Isabel, y en principio lo condenan a 10.000 euros de multa y luego el juez la reduce a 60 euros porque el Ayuntamiento no hace un informe en condiciones ¿para qué tanta molestia? ¿Por qué somos tan malos gestores? ¿Por qué somos tan permisivos? ¿Por qué no aprendemos de los gestores de otras ciudades y de otros países donde el problema no existe? Pues por todo esto es por lo que toda Granada, y no sólo el Albaicín, está plagada de vándalos de las pintadas. Porque hay impunidad total. |