SEMINARIO EUROPEO DE GESTIÓN DE CASCOS HISTÓRICOS

 

Granada, 8 noviembre 2000

 

 

PARTICIPACIÓN CIUDADANA EN LA REVITALIZACIÓN DE CASCOS HISTÓRICOS

 

 

Las propuestas de participación se presentan en la actualidad con una alta carga valorativa, de manera que no se cuestiona su bondad, sólo se discute sobre la mejor forma de impulsarla y desarrollarla.

(Prof. Rodrigo Baño. Sociólogo)

 

 

PARTICIPACIÓN

 

   Resulta evidente, y no deja de ser curioso, que en todas partes se proclame la necesidad de la participación.

  

   La ONU la considera un pilar básico para la educación o el desarrollo. Algunos hechos han influido para llegar a este consenso tan generalizado en los organismos internacionales:

La OMS en Malasia detectó unos pozos como foco de malaria por estar contaminados  y hace construir fuentes de agua potable al lado, perola enfermedad seguía. La gente utilizaba la fuente para lavar y bebía del pozo y ello por una buena lógica: el agua de la fuente dejaba la ropa más limpia y la del pozo tenía el sabor que a ellos les gustaba. Igual pasaba con la descalcificación infantil, lo malayos creían que la carne y el pescado se convertían en genios malos en el estómago de niños pequeños.

  

   Así se llega a la conclusión  de que el desarrollo económico, político o cultural requiere la participación en todas las fases del proyecto.

1.Análisis de la situación y necesidades

2. Estructuras participativas para que la gente se comunique y la comunidad se refuerce

3.Autoaprendizaje para dominar las nuevas situaciones y acciones

4.Acción participativa, que integre tecnologías adecuadas.

  

   Los empresarios son conscientes de la rentabilidad de la participación (ITT descubre que las condiciones de trabajo influyen menos que el hecho de poder dar su opinión; FIAT integra la participación en el trabajo mediante responsabilidades a quienes quieren tomarlas (vestuarios,...) en las decisiones de las condiciones laborales (turnos, horarios, equipos, ritmos,...) y en la planificación mediante delegados del personal.

 

   Por nuestra parte consideramos que es necesaria, no sólo por aumentar la eficacia de las políticas que se establecen, sino recuperar la gestión colectiva de lo público y para no agrandar la distancia entre dirigentes y ciudadanos.

  

La participación es un momento del proceso de intervención social, se orienta hacia la generación de situaciones y condiciones que favorezcan la participación progresiva de los ciudadanos en la reflexión, toma de decisiones y acciones.

 

   La participación va directamente relacionada con la implicación, es necesaria para que no se convierta en algo ajeno y contestado permanentemente.

 

  

DISTINTAS FORMAS DE ENTENDER LA PARTICIPACIÓN

 

   Pero, éste concepto como otros, ha sufrido un abuso que le ha ido vaciando de contenido, generando un desajuste mediante una práctica de mucho decir y poco hacer.

 

   Hay muchas formas de entender la participación, en función del lugar que se ocupe en la escala social, de aspectos ideológicos,... o la posición en la gestión de la ciudad.

 

   A veces se considera un simple ornato, una formalidad, una bonita declaración de intenciones, donde el movimiento vecinal se convierte en un convidado de piedra en las instituciones.

 

   Otras se entiende como mera información de las actuaciones administrativas, en ocasiones tan restrictivas que se limita al mecanismo electoral cada cuatro años.

 

   En muchos casos supone un conflicto entre la mística vecinal, en ocasiones limitada a la vida asociativa formal, y la rigidez administrativa, considerando la participación como una dificultad adicional o una pérdida de poder, más que como una posible contribución a las soluciones.

 

   Así, la participación se limita desde el plano de la Administración a “dar información” y desde el plano vecinal asociativo a “dar y tramitar quejas” en un proceso en todo caso unidireccional.

 

   Con frecuencia la participación sirve para justificar actuaciones disciplinarias de las administraciones, un escudo para enfrentarse ante intervenciones para restituir la legalidad, que deben ser cometido directo de los poderes públicos, sin necesidad de escudarse en el movimiento vecinal.

 

   Para nosotros la participación es un mecanismo fundamental del poder de los ciudadanos que debe evitar que la democracia formal, con su alternancia política y su representación electiva, se convierta en un simple rito sacralizado. La participación del movimiento vecinal siempre ha sido un elemento generador del cambio social. En consecuencia estamos hablando de recuperar unos planteamientos ideológicos y de transformación social como forma de canalizar las aspiraciones de los ciudadanos.

 

  Esto, que puede ser válido para el conjunto del movimiento social, tiene en el movimiento vecinal una especial incidencia al tener en cuenta el carácter integral de los problemas territoriales locales, ya que en ellos se manifiestan los problemas sociales, económicos, ecológicos, educativos o culturales,...

 

  En concreto, en el marco de la revitalización de conjuntos urbanos, como los cascos históricos, especialmente degradados y objeto de la especulación urbanística, bien por abandono o por conversión en centros comerciales, financieros, hosteleros,...  la participación y la implicación vecinal es fundamental para su revitalización y evitar su despoblamiento, su pérdida de identidad, su vitalidad,... Mucho más cuando el patrimonio se considera de una manera funcional e integral, como espacio de vida y convivencia, y no como meros elementos arquitectónicos.

 

   Es preocupante, sin embargo, como las actuales condiciones de la vida urbana, la degradación ambiental, la inseguridad, el deterioro de la calidad de vida, la incertidumbre, la precariedad laboral, la delincuencia, las mafias de la droga,... que están proliferando en el contexto de globalización económica neoliberal, constituyen un contexto propicio para que se fortalezca la reacción social y política. Por ello interesa mucho a los poderes públicos, que manifiestan su interés por la participación y la democracia, potenciar la participación ciudadana de forma real y efectiva.

 

   La participación vecinal puede resolver problemas de legitimidad social, y puede ser un elemento especialmente importante cuando hay implicados fuertes intereses económicas en la ciudad, como ocurre en los temas urbanísticos y de patrimonio.

 

 

CONDICIONES PARA LA PARTICIPACIÓN

 

La participación no es algo dado, requiere unas condiciones para su desarrollo y potenciación: La participación es un proceso gradual y dialéctico donde se ha de percibir su utilidad y donde la formación es imprescindible.

 

En primer lugar necesita credibilidad, la participación implica algo tan práctico como tiempo y trabajo, y aportarlos exige una cierta expectativa de que algo se puede lograr. Y respeto al esfuerzo de los ciudadanos y a su aportación a la vida de la comunidad.

 

Es necesario que se realice desde el primer momento y en todos y cada uno de los pasos.

 

Requiere aprendizaje para compartir los conocimientos con el técnico y no estar en dependencia con respecto a el.

 

Otra función, no menos importante, es mejorar el hábito participativo.

Acciones que la promueven:

            -generales: charlas, conferencias, visitas, reuniones, fiestas,..

            -de reflexión y diálogo: encuentros, debates, seminarios,...

            -de toma de decisiones: comisiones, consejos, asambleas, equipos,...

 

   A veces se observan problemas en la dinámica de participación, ya que para nosotros,  ante cualquier proceso de análisis de la realidad, el primer paso de cualquier investigación o acción comunitaria implica dar paso a la participación:

-desproporción ante el esfuerzo dedicado al diagnóstico y el dado a la intervención, o entre los datos que se recogen y los que realmente se usan;

            -falta de relevancia o significación de muchos datos;

            -a veces se pretende demostrar lo evidente, con una actitud falsamente científica;

-el dominio del especialista frente al discurso de la población, mediante un dominio de la información, el uso de una complejidad terminológica o metodológica,..;

-un análisis demasiado estático de la realidad, cuando ésta se caracteriza por el cambio continuo.

 

Para tratar de dar solución a esa problemática:

   Hay que estar abiertos a la descripción de lo que no se tiene, de lo que no hay como método eficaz para la intervención social, el descubrimiento de las causas de una situación.

 

   Hay que estar abiertos a la producción colectiva de ideas.

 

   Hay que estar predispuestos a los ajustes y retroalimentaciones tras los análisis dinámicos de la realidad.

 

   Hay que disponer de infraestructuras que permitan crear un movimiento ciudadano y una implicación y participación en los temas de su entorno, de su barrio, de su ciudad.

 

   Hay que contar con unos medios que permitan aumentar la conciencia de comunidad, tan importante en nuestro barrio, y que le permita a esta comunidad dotarse de la estructura social abierta y dinámica que posibilite la implicación y la participación de todo un barrio, de toda una comunidad.

 

   Esa importante conciencia de comunidad, base importantísima para una participación colectiva, puede verse afectada por la salida de los vecinos debido en gran parte a la especulación inmobiliaria y al deterioro del parque de viviendas y edificios comunitarios; al deterioro urbano de los barrios históricos que están siendo ocupados e invadidos por actividades no acordes con su trama urbana, con su estructura social (intensidad de tráfico rodado, movida, ocio masivo,...); o el uso residencial hotelero o de apartamentos en alquiler que con carácter masivo impiden la asimilación cultural del barrio por parte de los nuevos vecinos, cuando estos tienen un carácter temporal (estudiantes, personal de paso, visitantes,...)  Esta situación crea una fuerte contradicción con el criterio de autenticidad que se reclama en el Patrimonio Mundial.

 

   No es factible hablar de patrimonio en un sentido global sino se protegen todos los elementos que conforman la vida ciudadana: medio ambiente, vivienda, actividades compatibles, estructura urbana, infraestructuras, conservación de espacios, volúmenes, alturas, actividades, cultura entendida como conjunto de actividades que conforman una conciencia colectiva, una forma de ser,...

 

 

PROPUESTAS

 

   El movimiento vecinal de nuestros barrios históricos apuesta por una perspectiva de participación, de implicación, en la línea expuesta, y aporta la estructura participativa para hacer realidad la mejora de vida en nuestros barrios.

 

Sugerencias de desarrollar estos mecanismos de participación pueden ser:

 

            Unos verdaderos ayuntamientos de barrio, abiertos al movimiento vecinal, con poder decisorio efectivo, con soporte técnico y administrativo para intervenir en los problemas del barrio. Una administración que tiene que dotarse de medios y normas que le permitan intervenir con rapidez y eficacia en los procesos de disciplina, o en la degradación del barrio (calles, plazas, ruinas...). De nada sirve abrir expedientes si no se resuelven con agilidad, paralizando la actuación antes de que el proceso sea irreversible.

 

            Es necesario una normativa de protección que posibilite su propia retroalimentación y evaluación, para detectar los propios defectos y su modificación con rapidez para evitar actuaciones “legales” contrarias al sentido y la lógica de lo que queremos proteger.

           

            Las estructuras de vigilancia, seguimiento y control del patrimonio no puede ser casi exclusivamente técnico, ni actuar la margen de los órganos amplios de participación. Actualmente es más restrictivo el grupo de urbanismo de la Junta de Distrito que la propia Comisión de Seguimiento del PEPRI.

 

            Una presencia efectiva, no meramente nominal o testimonial, en los órganos de decisión descentralizada como patronatos, fundaciones, institutos,... que afecten a la vida del barrio.

 

            Los contratos de barrio, donde de forma oficial y garantizada, la administración y el movimiento vecinal se comprometen a realizar unas determinadas actuaciones, intervenciones,...

 

            Los jurados administrativos, equivalentes a los jurídicos, intervienen en los procesos decisorios estudiando, informando o proponiendo actuaciones en los diferentes ámbitos de la administración.

 

           

                                                        Manuel Navarro Lamolda

                                                        Presidente Asociación Vecinos Bajo Albayzín

                                                        Contactos: C/ San José Alta, 8    18010  Granada

                                                                         Teléfono y fax:  958 22 97 97

                                                                          www.imfegranada.es/albayzin

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